En el año 2050, el peso del plástico vertido al mar será superior al de todos los peces del planeta; El reciclaje doméstico e industrial es de vital importancia para reducir la presencia de plásticos en los océanos.
El Foro Económico Mundial da la voz de alarma sobre la preocupante situación de los océanos, sometidos a un vertido constante de basura, compuesta en un 80% de plásticos.
El estudio forma parte del proyecto MainStream, con el apoyo de la Fundación Ellen MacArthur, una británica que en 2005 batió el récord de circunnavegación alrededor del mundo en menos tiempo y sin escalas. En 2010, MacArthur creó su fundación, que lucha por la transición hacia una economía circular donde el reciclaje permita el pleno reaprovechamiento de los residuos, y la práctica desaparición de los vertidos.
Pruebas irrefutables de la contaminación marítima por plásticos
El gran hándicap a la hora de concienciar a la población y a las industrias de la necesidad de reducir los vertidos y reciclar, es que el problema parece lejano. No se ve, ni se puede tocar, a excepción de quienes viven en la costa o trabajan en el mar.
En cualquier caso, las evidencias empiezan a ser abrumadoras, y desde luego son visibles no solo a escala humana, sino incluso desde el espacio exterior, a la distancia donde orbitan nuestros satélites.
Además de la cantidad de basura que podemos encontrar en nuestras costas, en el Pacífico norte, en una zona donde las corrientes fluyen de forma circular, se está formando una gran aglomeración de basura, compuesta por plásticos en su mayoría. Esta gran mancha se ha dado en llamar la “isla de plástico”, o incluso “el séptimo continente”. No existe acuerdo sobre la extensión que se le calcula a este parche de plásticos y otros vertidos, y las cifras difundidas por los medios oscilan entre 1,5 y 3,4 millones de km². Por emplear magnitudes más familiares, la isla de basura tendría entre 3 y 7 veces el tamaño de la superficie de España.
Y lo cierto es que no se trata de un hecho aislado. Podría haber una isla de plástico en cada cuenca continental, en zonas donde, como en el pacífico norte, se producen corrientes circulares que facilitan la condensación de vertidos. Por lo pronto, ya hay otra gran concentración de basura en el océano Atlántico, entre la latitud de Cuba y el norte de EEUU, aunque se encuentra sumergida a 30 m de profundidad. Otra más estaría situada en el océano Índico, y no se descarta la existencia de otras islas de detritos.
Algunos expertos, como Carlos Duarte, investigador del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados, relativizan la magnitud del fenómeno: “El problema existe, pero lo de la isla de plástico del Pacífico es una exageración de los medios”, afirmaba en una entrevista de 2014. Pero las palabras de Duarte no eran alentadoras, cuando aseguraba que, en este macrovertedero marítimo habría hasta 1 millón de pequeños framentos de plástico por cada km².
La importancia del reciclaje de envases de plástico industriales
Lo peor de todo no es la presencia de plásticos en sí, sino la contaminación que provocan los agentes tóxicos con los que se tratan durante su fabricación, que pasan al organismo de la fauna marina y, con ella, probablemente a nuestro propio organismo.
Los ecosistemas de los océanos son de vital importancia para la vida en el planeta, y de su cuidado depende también nuestro futuro.
El reciclaje de envases de plástico es fundamental para conservar nuestros mares lo más limpios posible.
Además del consumo cotidiano, la industria también genera plásticos que no siempre se gestionan como residuos, y acaban en vertederos, o incluso, aunque en menor proporción, en los océanos.
Desde Ecobidón queremos hacer un llamamiento a la responsabilidad de las empresas, para que contraten servicios de tratamiento y destrucción de sus envases de plástico.
En nuestro caso, hemos basado nuestro modelo de negocio en el reciclaje y la reutilización, y Ayudamos a las empresas a recuperar bidones y envases de plástico (entre otros materiales), o realizamos un tratamiento final para recuperar la materia prima.
Juntos, podemos trabajar por una correcta gestión de los residuos; por la conservación de los ecosistemas marinos; ¡por el futuro de todos!
El estudio concluye que, en 10 años, nuestros mares albergarán 1 tonelada de plástico por cada 3 toneladas de peces. Cada año, un mínimo de 8 millones de toneladas de plástico son vertidas a los océanos; el equivalente a dos camiones descargando basura en el mar por minuto. A este ritmo, en 2050, el peso total de los plásticos vertidos a los océanos, ¡superará al de los peces que hay en los mares de la Tierra!