El cambio climático es probablemente el mayor reto a escala global al que nunca nos hayamos enfrentado. Pero la toma de conciencia por parte de instituciones, empresas y consumidores es cada vez mayor. ¡Todavía hay esperanza!
En los últimos 100 años, la temperatura media global ha aumentado 0,76 Cº (el incremento en España es de 1,5 Cº). Puede parecer poco, pero a escala planetaria se trata de un aumento vertiginoso en un lapso de tiempo demasiado breve. La acción humana desde el inicio de la Revolución Industrial está acelerando el proceso de forma preocupante. Sobre todo durante los últimos decenios. Para finales de siglo se espera que la temperatura haya aumentado entre 1,8 y 4 Cº.
Algunas de las consecuencias del incremento descontrolado de la temperatura global son: aumento de los desastres naturales, un clima más extremo, el deshielo de los glaciares y casquetes polares, el aumento del nivel del mar, un incremento de las sequías en muchas regiones y la extinción de un gran número de especies animales y vegetales.
Y todo ello debido, en gran medida, a los combustibles fósiles que empleamos para poder funcionar como civilización, y que posibilitan la producción de energía, el transporte, la fabricación de productos de consumo, etc. Estos procesos requieren energía en cuya producción liberamos gases de efecto invernadero, responsables de que el calor del Sol quede atrapado en la atmósfera.
Pero existen indicios para pensar que podríamos estar cambiando de rumbo de los acontecimientos; puede que todavía estemos a tiempo de controlar el nivel de emisiones.
¿Qué se está haciendo para revertir los efectos de las emisiones de CO2 en el cambio climático?
Compromisos, medidas, descubrimientos científicos, avances tecnológicos y, lo más importante, ¡compromiso! Esas son las claves de los avances en materia de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero.
Veamos algunos de los acontecimientos que nos permiten mirar al futuro con optimismo:
1. El acuerdo alcanzado en la Cumbre de París
El Protocolo de Kioto logró reducir en un 22,6% las emisiones de gases de efecto invernadero entre 2005 y 2015, respecto a los niveles de 1995. La Cumbre del Clima en París recoge el testigo de Kioto, y sube el listón todavía más, logrando un acuerdo mundial respaldado por 195 países. El acuerdo de París obliga a las naciones a respetar su compromiso para evitar que el calentamiento global suba por encima de los 2 Cº, aunque el propio documento asume que lo deseable sería no superar los 1,5 Cº.
2. El paquete de Economía Circular de la Unión Europea
El concepto de Economía Circular designa una forma de tratamiento, reaprovechamiento y reciclaje de los residuos para reducir al mínimo los desperdicios que van a parar al vertedero. En febrero de 2015, la UE aprobó un nuevo paquete de medidas que, entre otras cosas, fomentará el reciclaje ahorrando consumo energético y liberación de CO2 a la atmósfera.
3. El desarrollo de las energías renovables
El 2016 será un buen año para las renovables, según Pablo Ayesa Pascual, director general del Centro Nacional de Energías Renovables (Cener), una institución que invierte en proyectos de I+D+I.
Y como ejemplo de desarrollo tecnológico al servicio del medio ambiente, un proyecto de investigación de la Universidad de Michigan que podría convertir cualquier cristal en una célula fotovoltaica. Se espera que, con esta tecnología, los smartpnones del futuro funcionen con la energía del Sol y no sea necesario volver a cargar sus baterías con electricidad nunca más.
4. La mayor conciencia ecológica de los ciudadanos
Las estadísticas indican que 3 de cada 4 españoles son conscientes del problema medioambiental y depositan sus desechos en el contenedor adecuado. Cada español deshecha 50 kg de envases al año, con solo una botella de plástico reciclada se ahorra la energía equivalente a 4 lámparas con bombillas de bajo consumo (20 W) durante 4 horas, y el CO2 vertido para su producción.
Comprender la importancia de las acciones individuales es determinante para poner freno al cambio climático.
5. Un mayor grado de compromiso por parte de las empresas
Salvo excepciones , la voluntad de combatir el calentamiento global por parte de las empresas está cada vez más extendida. Esa es la conclusión a la que llega el Informe CDP Cambio Climático en España y Portugal. En la muestra Iberia 125 de este año, 12 grandes empresas han alcanzado la máxima puntuación en transparencia de información sobre el cambio climático.
Y no solo las grandes empresas están participando en este cambio de mentalidad. También la pequeña y la mediana empresa.
En ECOBIDÓN estamos orgullosos de formar parte de la solución, y no del problema. Y es que nuestra actividad económica redunda en un beneficio para toda la sociedad y nuestro patrimonio natural.
Reciclamos y recuperamos bidones metálicos, de plástico y envases GRG/IBC. Al hacerlo, ahorramos costes a las empresas y les ayudamos a participar en la lucha contra el cambio climático. Durante el período 2012-2014, ECOBIDÓN permitió una reducción de CO2 de 740.714 Kg CO2/kg.
Hay un futuro, y trabajamos duro para que sea sostenible.